Arte conceptual: tendencia invasiva del arte, en el que la plástica, como transformación de la materia, va de secundaria a inexistente. El carácter invasivo o cuasicancerígeno radica en su inserción abrupta y expansión continua en la historia del arte, y en su capacidad de reemplazar el percepto, unidad interpretativa del arte como lenguaje, al concepto, término absorbido del diseño publicitario. La razón de ello es el efectismo demostrado por este campo en la mercadotecnia, que superó la recepción estética en la era mediática; o como quien dice "si no puedes con tu enemigo, únetele". Además, la consigna postmoderna de "todo vale" ha favorecido al arte conceptual, llevándolo de movimiento a sustrato y corpus de toda obra. De esta forma anula la posibilidad discursiva de aquella, su dialógica inmanente. Puede decirse entonces que el arte conceptual es simultáneo a la anunciada muerte del arte. Cordura: padecimiento en el que el sujeto funciona con cuerda o resorte. El “cuerdo” (paciente con psicopatología severa) fantasea con la ilusión de autonomía, sin advertir que es conducido por hilos retorcidos. La cordura, antónima de la genialidad, mantiene al paciente refrenado en su potencial creativo y sensorial. Por su parte, la cuerda es aquella herramienta que permite amarrar al bienpensante mediante nudos o cabos; de allí las limitaciones mentales a las que se ve sometido. Enamoramiento: enfermedad mental transitoria, en vías de catalogación por la OMS. El cuadro patológico recuerda los efectos físicos del consumo de algunos sicotrópicos americanos, e incluye: dispepsia (sensación de mariposas volando en las vías gastrointestinales), vértigo de Ménière y otros problemas del equilibrio (sensación de levitación o "flotación"), e inapetencia leve hasta anorexia crónica, entre otros síntomas. Además, el síndrome comprende consecuencias perniciosas al psiquismo del paciente a corto y mediano plazo, como: trastorno bipolar (alternancia de euforia y depresión), alucinaciones visuales (ver al objeto del deseo más "bonito" de lo que es), trastornos del sueño (somnolencia, insomnio, sonambulismo), etc. Dada su inexistencia en los libros clásicos de medicina, no se conoce una cura para el mal que, en promedio, afecta a diez de cada nueve colombianos. Los daños colaterales del enamoramiento incluyen destrucción neuronal, pérdida de la independencia y algunas formas de autoinmolación, como el matrimonio. Humanidad: conjunto de bípedos implumes en aumento progresivo, altamente peligrosos en el uso de la "razón", sofisma exclusivo de su género y excluyente del resto. Puede decirse, además, que la humanidad es un mal que los humanos consideran inhumano erradicar, al ser el exterminio una alternativa irracional. En este sentido, la autodestrucción de la raza ha dependido de la ejecución de estrategias racionales, es decir, humanas. Política: alquimia inversa. Arte de convertir el oro en plomo y la pomada en excremento (o mermelada según el caso). Por este prodigio, a los practicantes de la política −los llamados “políticos”− se les asocia con intestinos, dada su capacidad de absorción y procesamiento de lo que es útil, para su ulterior transmutación en heces. Triángulo amoroso: poliedro relacional en desuso. Indicadores cronológicos demuestran que cada generación añade un ángulo a la geometría del amor. Para los próximos diez años se estima que la figura que tipificará la promiscuidad romántica será el rombicosidodecaedro.
